La NIA 580 trata de la responsabilidad que tiene el auditor de obtener manifestaciones escritas por parte de la dirección o los responsables de gobierno de la entidad; estas manifestaciones constituyen evidencia de auditoría para que el auditor alcance las conclusiones que requiere en su opinión.
La NIA 260 explica la responsabilidad que tiene el auditor de informar a los responsables del gobierno de la organización respecto a los hallazgos que se presenten en la auditoría de los estados financieros; asimismo expone los asuntos que deben ser objeto de comunicación.