El manejo de la tecnología por parte de las organizaciones hace que estén expuestas a un sinfín de delitos informáticos, que pueden llegar a implicar graves consecuencias para el funcionamiento de las empresas.
El nivel de información que se maneja dentro de las organizaciones implica que todos los colaboradores apliquen medidas de seguridad para proteger la información, dado que esta puede ser objeto de delitos informáticos.