Desde el 1 de julio de 2018 rige el impuesto a las plataformas, cobrado por cada transacción de pago de estos servicios digitales prestados desde el exterior.
Las empresas deben reportar información de los servicios prestados a los países, y la carga tributaria debe recaer directamente sobre ellas.
En Colombia y el mundo hay aplicaciones y plataformas digitales que generan dinero, pero sin pagar impuestos.
Para la OCDE, las autoridades fiscales encuentran difícil aplicarles impuestos de manera efectiva.
Se busca que estas aplicaciones no solo paguen impuestos, sino que generen empleos formales.
Después de varios meses de diálogo abierto, el Ministerio de Comercio, la Dian y Airbnb, acordaron la inscripción de la plataforma en el Registro Único Tributario y el tributo efectivo del IVA.
A pesar de no contar con una reglamentación en el país, la empresa de ya ha pagado un total de $35 mil millones a diciembre del 2018, correspondientes a este impuesto.