El empleo no asalariado viene creciendo en el país desde finales del año anterior, y en los últimos meses ha repuntado en un 2 %. En consecuencia, se observa un crecimiento de los ingresos salariales de los trabajadores no asalariados. Trabajos de baja calidad se imponen para varios perfiles.
Aunque no puede establecerse una relación de proporcionalidad entre el género de la persona y su productividad, existen actividades que se adaptan mejor al individuo según esta característica. En razón de esto, a la hora de ofertar algunos empleos las empresas consideran este atributo.
Por medio de evaluaciones o exámenes laborales periódicos se pueden demostrar las razones objetivas para que exista una desigualdad salarial. El factor antigüedad también puede inferir en la diferencia salarial, así haya el mismo cargo, horario y funciones.
Hace más de tres años se expidió la Ley 1496 de 2011 con la cual se buscaba combatir la desigualdad en la remuneración salarial de géneros y crear mecanismos que garanticen condiciones igualitarias en el medio laboral, sin embargo a 2015 no se ha dado cumplimiento a esta normatividad.